¿Qué es un animador 3D? ¿Cómo se consigue dar vida a un personaje?
Quienes se dedican a la animación transmiten la sensación de vida a los personajes y objetos, posándolos o dibujándolos en cada fotograma de una secuencia de imágenes. Parece sencillo, ¿verdad?
Hay animaciones que hacen reír, llorar o pasar miedo. Y conseguir eso tiene su misterio. En este artículo profundizamos en este tema: ¡abajo las luces, arriba el telón!
Animación: ¿cómo es esto de dar alma a los personajes?
La palabra “animación” tiene su origen en el latín “anima” y cuyo significado es “alma”. Por lo tanto, animar significa dar alma a un personaje o un objeto de forma que parezca que tiene vida, piense y actúe por sí mismo. Un animador de personajes es quien se encarga de insuflar vida a los personajes de una producción animada.
¿Y cómo se hace? Hay multitud de técnicas y métodos que generan esa sensación de vida en los personajes u objetos (stop motion, 2D tradicional, cut-out, 3D…), pero todas comparten en su esencia el origen del cine: la ilusión de movimiento por la persistencia retiniana. Se podría decir, entonces, que quien anima es el actor o actriz de una producción animada.
El animador es quien se encarga de decidir si un personaje se moverá rápido, lento, alegre, cansado, encorvado, tendrá un tic nervioso, pesará mucho o poco… Son una pequeña parte dentro de la gran estructura que es una producción. No diseñan, ni modelan, ni pintan, ni iluminan, ni guionizan, ni ponen voz a las escenas y personajes. “Únicamente” los mueven.
En este ejemplo podemos ver cómo el departamento de animación ha trabajado en dar un carácter distinto a cada personaje realizando una sencilla acción:
Todos ellos hacen la misma acción: entrar en una sala y sentarse en una silla, pero podemos ver como cada uno toma decisiones y realiza acciones distintas para ello. Cómo se mueven nos da una idea de quién son y cómo piensan. En esencia, eso es animar.
¿Cómo es ser animador?
Un animador puede trabajar en películas, series de tv, videojuegos y/o publicidad. En ese sentido hay quien se especializa en un campo y le dedica toda su trayectoria, pero también hay quien cambia con cierta frecuencia de ámbito por motivos muy diversos.
A grandes rasgos podemos diferenciar entre animadores 2D, 3D o animadores de stop motion. Aunque sus funciones y objetivos dentro de la producción son exactamente las mismas, usan herramientas diferentes.
¿Qué es un animador 3D?
Los animadores 3D usan rigs (mallas poligonales con controladores que permiten mover su esqueleto interno) dentro de un software 3D. Una de las ventajas principales de este medio es que no hay que saber ilustrar especialmente bien para dedicarse a ello, como sí sucede en la animación tradicional 2D.
De cierta manera, el ordenador nos ayuda a completar las interpolaciones de movimiento entre las poses. Pero esto no significa que ser animador de 3D sea más fácil que ser otro tipo de animador, puesto que trabajar teniendo en cuenta las 3 dimensiones y adaptarse a todas las complicaciones técnicas que conlleva también tiene sus complicaciones.
- La rutina de cualquier animador en un estudio suele ser recibir asignaciones de planos de la secuencia en que esté trabajando y buscar la manera de mover a los personajes acorde a las ideas de la dirección.El animador no parte de cero sino que recibe el storyboard y el layout de su escena al empezar. Eso le sirve de guía para desarrollar ideas sobre cómo mover a los personajes en la escena.
- Como es un trabajo lento y costoso se suele dividir el proceso en varias etapas para que quien supervisa pueda ir descartando ideas y orientando la animación hacia donde más interese.
- En el trabajo de animador o animadora es habitual, por lo menos durante los primeros años de profesión, cambiar de empresa con frecuencia (1-3 años). Aunque eso depende del tipo de proyectos en los que se trabaje y del modelo laboral de la empresa.
- La movilidad es, para muchos profesionales, uno de los grandes contras de esta profesión. Cambiar de empresa con frecuencia suele acarrear mudanzas, viajes y demás. Aun así, en estos dos últimos años el trabajo en remoto ha ido ganando terreno e incluso grandes producciones como “Raya y el último dragón”, de Disney, se han producido 100% teletrabajando.
El proceso de trabajo del animador 3D
Primero el animador se graba para captar los movimientos naturales del cuerpo, luego interpreta esas referencias (normalmente con dibujos o animaciones 2D) y las traspasa al personaje 3D. Después coloca las poses más importantes del plano.
Tras enseñar el blocking a dirección y recibir feedback termina de posar los fotogramas intermedios y finaliza el plano para que pase al siguiente departamento.
Veamos a continuación algunos ejemplos de el progreso de un plano animado:
¿Te interesa este tema?
Te aconsejamos un par de lecturas imprescindibles que son grandes referentes para la animación: “The animator’s survival kit“ de Richard Williams y “Disney animation: the illusion of life“ de Frank Thomas y Ollie Johnston.
¿Qué se necesita para ser animador 3D?
Para empezar a ser animador 3D lo único que se necesita es mucho, mucho interés, paciencia y grandes dotes de observación. Con eso en la mochila ya se puede empezar el camino de la formación para conseguir una demo reel: un video de presentación que recopile tus mejores trabajos y demuestre de qué eres capaz.
Pero estudiar los fundamentos y tener la primera reel es solo el principio. Se suele decir que ser animador es una carrera de fondo, porque para no quedarse atrás hay que estar al día de las innovaciones técnicas y también de las novedades artísticas del medio. Siempre quedan cosas por aprender, aspectos por mejorar o estilos que descubrir.
Las maneras de animar a un personaje son muy diversas, igual que las maneras que hay de representar un objeto o una acción son infinitas. Por ello existen muchísimos estilos de animación: algunos más próximos a los movimientos realistas y otros más alocados y exagerados. Y en ese sentido la experiencia es más que un grado.
En cuanto un animador termina sus estudios es fácil descubrir que, mientras que algunos perfiles son especialmente buenos interpretando mecánicas del cuerpo realistas o criaturas, otros son especialmente buenos transmitiendo emociones muy complejas con movimientos sutiles, y en cambio otros lo son con la animación cartoon.
Eso sí, para ser un gran animador es imprescindible saber adaptarse a cualquier estilo o requerimiento de la producción. Tal vez este aprendizaje constante es el que hace más divertida e interesante la profesión.
Además de conocer los estilos de animación es importante familiarizarse con las especificidades del medio: si quieres trabajar en películas de animación es importante conocer los orígenes y las normas de la gramática audiovisual. Si prefieres trabajar en videojuegos necesitarás conocer cuantos más tipos de videojuegos mejor.
Para terminar, no hay que olvidar el trabajo en equipo. El trabajo de animador puede parecer solitario, pero en un estudio donde trabajan cientos de personas es imprescindible saber comunicarse con el resto del departamento y saber escuchar e interpretar muy bien las indicaciones. El trabajo en equipo es una de las claves del éxito de una producción.
Ahora ya sabes qué es un animador 3D y que no es solamente el encargado de dar vida a personajes u objetos a través del movimiento, sino de otorgarles alma. La animación es un arte, como la interpretación.
En este video te mostramos el camino por el cual pasan los alumnos de Animum para llegar a convertirse en animadores profesionales:
La exploración de nuevos lenguajes visuales y nuevas posibilidades interpretativas forman parte de la magia de dedicarse a esta industria.
Si ya has dado el paso y, efectivamente, has elegido la profesión de animador 3D, te será necesaria una demo reel. Para ello el camino más sencillo es cursar una formación especializada. Pero el aprendizaje de la animación nunca termina. La experiencia profesional siempre abre nuevos horizontes de aprendizaje.