¿Sabías que para recrear cualquier objeto o personaje en tres dimensiones por ordenador es necesario realizar un modelado o malla 3D? Y los programas de modelado 3D son clave para poder llevarlos a cabo.
Algunos softwares como Sketch Up o Blender son gratuitos incluso para uso comercial; sin embargo, en el mundo laboral el software propietario lleva la delantera. Conocer las características de cada programa es muy recomendable antes de tirarse a la piscina, ya que, pese a compartir bastantes capacidades (mapeado de UVs, texturizado, rigging, animación, iluminación, renderizado…), según la aplicación que necesitemos puede convenir más uno u otro.
El modelado 3D es una disciplina compleja que requiere de mucha práctica y perfeccionamiento de ciertas habilidades para conseguir buenos resultados. Una base teórica y una visión holística del proceso de creación de 3D son fundamentales para adentrarse a realizar modelos.
Así pues, vamos a explorar las diferencias entre los 5 programas de modelado 3D más utilizados para ayudarte a tomar la decisión correcta.
Los 5 programas de modelado 3D más populares:
Autodesk Maya
Maya es el rey del modelado 3D, un potente programa que se ha convertido en estándar de la industria. La mayoría de empresas de animación y videojuegos lo usan para producciones del más alto nivel y es la vara con la que se miden el resto de competidores. ¿Sabes cuál es el único software 3D premiado con un Óscar? Efectivamente, Maya.
Se trata de un software todo en uno que sirve para las diferentes etapas del modelado, aunque sin duda destaca por encima de otros en los apartados de UV mapping, retopología, rigging, simulaciones y, especialmente, en animación.
Además de las herramientas que lleva de serie, existen un sinfín de plugins que agregan cualquier función de la que pudiera carecer, haciéndolo posiblemente el software más completo. Es más, a través de su propio lenguaje de programación (MEL) o Python es posible crear scripts para elevar todavía más su versatilidad.
Originalmente independiente hasta su compra por Autodesk, el motor de renderizado de Maya, llamado Arnold, es relativamente fácil de usar y ofrece resultados espectaculares (demostrables, de hecho, en películas de animación de elevado presupuesto).
Conocer cómo se trabaja en Maya nos abrirá las puertas a ser contratados en la mayoría de las empresas, ya que es de los más utilizados, especialmente en la industria cinematográfica.
La mayor desventaja es su alto precio, aunque Autodesk ofrece licencias gratuitas para estudiantes.
Autodesk 3ds Max
Anteriormente conocido como 3D Studio Max, este programa también forma parte de la suite de Autodesk y comparte la mayoría de funciones con su hermano Maya: modelado, esculpido, rigging, animación, creación de UVs, texturizado, iluminación, simulación, render…
Pese a sus similitudes, ambos softwares se presentan de forma bastante distinta, por lo que cada modelador suele tener predilección por uno u otro, aunque los de videojuegos suelen decantarse por 3ds Max.
3ds Max sobresale especialmente en el modelado poligonal, donde a las clásicas herramientas para redondear, alabear y deformar el modelo, añade una batería de modificadores que automatizan o facilitan la transformación de la geometría de un sinfín de maneras.
Otro aspecto en el que 3ds Max despunta es en el renderizado con su motor integrado V-Ray, con el que se pueden lograr auténticas maravillas fotorrealistas.
Los resultados fotorrealistas de V-Ray, junto con la amigable integración con otros programas como Revit o Autocad, son los motivos por los que el uso de 3ds Max esté tan extendido en infoarquitectura.
Se trata de un programa de alto coste, pero dispone de licencias gratuitas para estudiantes. A diferencia de Maya, sólo se encuentra disponible para Windows.
Blender
Blender es un todoterreno del 3D, uno de esos programas que cuesta creer que sean gratuitos.
Cuenta con infinidad de funcionalidades y posibilidades de personalización, lo que hacen de él un software de lo más versátil. La Blender Foundation continúa actualizando su ya extenso conjunto de herramientas de modelado, como por ejemplo los modificadores que facilitan la creación de mallas destinadas a la impresión 3D.
También es muy destacable el apartado de esculpido, bastante potente y flexible para el diseño de personajes o entornos. La flexibilidad de Blender es tal que hasta se pueden desarrollar videojuegos en él.
Esto es gracias a GameKit, el motor gráfico de juegos que lleva incorporado y que permite hacer renders casi a tiempo real. Eso repercute en la calidad del render, pero facilita su aprendizaje a los iluminadores, que pueden comprobar la configuración de su escena al momento, sin esperar minutos a que esté listo un render. Desarrollar juegos íntegramente en Blender no es mejor opción que los motores de juego ya extendidos en el mercado, pero es buena prueba de lo completo que es.
Dada su naturaleza open source, Blender permite que se le añadan funciones programadas en Python, ampliando aún más su cartera de recursos.
La parte negativa de Blender es su elevada curva de dificultad inicial, pues al abarcar tantos campos, no llega a estar especializado en ningún área. No obstante, películas como “Robot 7723” o los cortos de Blender Foundation son prueba de que es posible llegar muy alto empleando un software abierto y gratuito.
Cinema 4D
Cinema 4D es otro de los programas de modelado 3D más completos, aunque flaquea en las áreas de esculpido y mapeado de UVs.
El software de Maxon es algo menos conocido que otros de la lista, aunque cuenta con muchos automatismos que lo hacen ideal para Motion Graphics, diseño e ilustración. Dispone de una interfaz muy limpia e intuitiva, lo que le hace relativamente sencillo de aprender. El conjunto de herramientas MoGraph es su mayor baza, permitiendo la creación de logotipos animados y efectos vistosos con bastante facilidad.
Sus licencias perpetuas no son especialmente asequibles, pero cuenta con licencias para estudiantes y planes a corto plazo a precio reducido.
Zbrush
Adquirido a principio del año 2022 por Maxon, Zbrush es el software por excelencia para crear esculturas digitales. Hace años se debatía el título con Autodesk Mudbox, pero este último fue desplazado y sus mejores funciones han ido implementándose en Maya.
Utilizar ZBrush es como esculpir con arcilla o plastilina, ya que se inspira en las técnicas de escultura tradicionales para ofrecer herramientas digitales similares que permiten desatar la creatividad artística del escultor.
Con una paleta de más de 30 “brochas” de esculpido, ZBrush se desmarca de cualquier programa disponible en el mercado y se sitúa como el software estándar en su género.
También cuenta con funciones de pintura digital y modelado tradicional, aunque su uso es obtuso. Zbrush hace un uso inteligente de los recursos del ordenador, permitiendo trabajar con mallas de resoluciones muy altas (de decenas de millones de polígonos) con un RAM bastante comedido.
La interfaz de Zbrush es completamente personalizable, aunque requiere de bastante práctica para llegar a dominarla. El uso de Zbrush hace casi imprescindible una tableta gráfica sensible a niveles de presión, mejor todavía si cuenta con pantalla.
Zbrush es utilizado por los estudios de animación del mundo para la creación de modelos orgánicos, aunque sus aplicaciones sean mucho más limitadas que los anteriores programas. Su licencia también es bastante costosa, pero es probable que pronto se integre a los planes reducidos de Maxon.
2 respuestas
me parece muy chevere la aplicacion
¡Gracias por tu comentario, Yeison!